Especialistas debatieron sobre intoxicación por plomo en las infancias
En el marco de un conversatorio virtual, profesionales de la Salud dialogaron en torno a esta problemática global y sus medidas de prevención. Coincidieron en que las fuentes de exposición más frecuentes en la Cuenca se vinculan con actividades laborales informales.
A raíz de la publicación de un artículo de divulgación del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) sobre la problemática de la intoxicación por plomo a nivel mundial, la Dirección de Salud y Educación Ambiental de ACUMAR convocó a médicas y médicos especialistas a debatir sobre la temática, que afecta a parte de la población de la Cuenca Matanza Riachuelo. El artículo original de UNICEF, escrito en inglés, puede consultarse aquí.
El encuentro también se propuso como instancia de formación para trabajadoras y trabajadores de ACUMAR, así como parte de los espacios participativos que contribuirán al Plan Sanitario de Emergencia del organismo, actualmente en reformulación.
“El artículo es muy importante porque muestra que la escala de la problemática es mayor a nivel mundial de lo que se pensaba. La prevención es fundamental, así como saber exactamente dónde están viviendo nuestros niños y niñas, de qué trabajan sus padres y madres, dónde juegan, qué hacen”, afirmó la médica pediatra Adriana Grebnicoff, especialista en Salud y Ambiente del Equipo de Salud Ambiental del Ministerio de Salud de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
La médica pediatra del Hospital Garrahan, Marisa Gaioli, destacó la necesidad de aplicar pesquisas o historias clínicas ambientales en las consultas pediátricas. “Es la mejor forma de detectar una enfermedad que es asintomática o que tiene manifestaciones subclínicas en la mayoría de los casos”, sostuvo la secretaria del Comité de Salud Infantil y Ambiente de la Sociedad Argentina de Pediatría.
Para el médico toxicólogo del municipio de Lomas de Zamora, Guillermo Grau, la importancia del artículo radica en sus aportes a la actualización de las fuentes de intoxicación: “Pone en agenda que dejemos de hablar sólo de pintura y de naftas y empecemos a pensar en otros determinantes. Son necesarios equipos técnicos capacitados en Salud pero también de otras áreas de abordaje que acompañen y permitan una reconversión real de la calidad de vida de las familias, como la mejora de las viviendas”.
Avances en la investigación
Las y los especialistas coincidieron en que el conocimiento global, pero también local, sobre la temática ha evolucionado mucho en las últimas décadas. “Hemos aprendido en el camino. Cuando comenzamos en 2009 en Villa Inflamable, leíamos la bibliografía internacional y encontrábamos que las fuentes mencionadas no coincidían. Lo que sí fuimos encontrando fue una asociación cada vez mayor entre pobreza, necesidades básicas insatisfechas, altos niveles de plomo y padres y madres con actividades laborales asociadas a reciclado y cartoneo”, explicó Grau, miembro fundador de la Sociedad Iberoamericana de Salud Ambiental.
La médica pediatra y toxicóloga María Teresa Yanicelli también formó parte del equipo que estudió el caso del barrio Villa Inflamable, en Avellaneda. “Una fuente importante que empezamos a detectar fue el chatarreo, extendido como fuente laboral muy cerca del año 2001. Entendimos que los niños y niñas acompañaban a sus padres en esas actividades. Analizamos los domicilios y vimos también que ahí se acumulaba la chatarra, se quemaba plástico, cables. Otro factor son los terrenos rellenados con escombros contaminados, o que fueron sitios de quema de basura de todo tipo”, explicó la especialista en evaluación de contaminación ambiental del Ministerio de Salud.
Por su parte, la médica Susana García, a cargo del Programa Nacional de Prevención y Control de Intoxicaciones del Ministerio de Salud y ex directora de Salud Ambiental de ACUMAR, destacó la relevancia de que las áreas de Ambiente y Salud trabajen juntas para efectuar los cambios necesarios para la prevención. En este sentido, el médico pediatra y también ex director de Salud Ambiental de ACUMAR, Fernando Nunes, puso énfasis en trabajar sobre los determinantes sociales de la salud y alertó por la potencial profundización de la problemática debido al contexto de pandemia.
El encuentro fue conducido por la coordinadora de Salud Ambiental, Silvia Ferrer, y contó con la participación del director general de Gestión Política y Social, Antolín Magallanes. También se realizó una breve exposición sobre la situación de niñas y niños en seguimiento por toxicología en la Cuenca, a cargo de la médica toxicóloga Valeria Malinovsky y la licenciada en nutrición Alejandra Piegaro, de la Dirección de Salud y Educación Ambiental de ACUMAR.
La directora del área, Maru Dakessian, presentó la actividad y destacó su importancia como instancia de formación y actualización, en el marco del proceso de democratización del conocimiento en Salud.