Salud Ambiental: avanzan las evaluaciones EISAAR
A través de los operativos, que se desarrollan en articulación con los municipios, se busca conocer la situación sociosanitaria y ambiental de la población de la Cuenca.
Las Evaluaciones Integrales de Salud Ambiental en Áreas de Riesgo (EISAAR) son encuestas a la comunidad para conocer la situación social, ambiental, educativa y de salud de la población que habita en la Cuenca Matanza Riachuelo, así como para elaborar propuestas de resolución de las problemáticas identificadas. Actualmente, se desarrollan en distintos barrios de Esteban Echeverría, La Matanza y Lomas de Zamora.
Las EISAAR, que se llevan adelante en articulación con las distintas jurisdicciones, tienen entre sus objetivos identificar posibles amenazas y daños al ambiente y la salud, gestionar el acceso a la atención, así como dar seguimiento, en caso de ser necesario, y diseñar acciones de respuesta integrales a las problemáticas ambientales de cada barrio.
ACUMAR, con el fin de potenciar el alcance de estas acciones, celebró acuerdos con la Universidad Nacional Arturo Jauretche, la Universidad Nacional de Lomas de Zamora y la Universidad Nacional de La Matanza para que estudiantes de las casas de estudio participen en la aplicación de pesquisas.
En lo que va del año, ya se visitaron 13.704 hogares. Además, durante los operativos se aplican vacunas del calendario, se entregan cepillos dentales ecológicos junto con recomendaciones para la higiene bucodental, y se trabaja en la salud de animales de compañía, entre otras acciones.
“Las evaluaciones EISAAR son una gran herramienta para contar con un aproximación diagnóstica actualizada y situada de las zonas de riesgo ambiental de la Cuenca, así como oportunidades para detectar y trabajar junto a la comunidad en la resolución de problemáticas ambientales, sociales y sanitarias. En cada barrio que llegan las EISAAR, llegan también servicios de salud que ayudan a prevenir y mejorar la calidad de vida de la población”, destacó el presidente de ACUMAR, Martín Sabbatella.
Las evaluaciones constan de una primera etapa en la que se lleva a cabo una pesquisa comunitaria y evaluación toxicológica ambiental con el objetivo de recolectar datos, a través de entrevistas a referentes locales, que permiten identificar los problemas y amenazas ambientales del territorio y generar intervenciones rápidas ante situaciones detectadas que así lo requieran. De ser necesario, el equipo de toxicología ambiental clínico-comunitaria realiza entonces análisis de suelo y/o agua.
Luego, se realizan visitas a los hogares para conocer la situación social, ambiental, educativa y de salud de las familias y, de corresponder, se hacen evaluaciones de toxicología poblacional. Estas jornadas también incluyen actividades de educación para la salud.