Sistema Riachuelo: la primera gran ampliación cloacal de la Cuenca en más de 70 años
Esta megaobra de ampliación cloacal es una de las intervenciones más importantes comprendidas en el Plan Integral de Saneamiento Ambiental de ACUMAR, ejecutada por AYSA, que permitirá mejorar la calidad de vida de la población de la Cuenca y abordar la mayor fuente de contaminación del río: los efluentes cloacales sin tratamiento.
El Sistema Riachuelo es una obra de ingeniería cloacal que mejorará el servicio y la calidad de vida de la población, al mismo tiempo que evitará la llegada de contaminación de carga orgánica al Riachuelo. El diseño incluye un megacolector, que ya cuenta con un 100% de avance, el emisario subfluvial construido en un 100% y una planta de pretratamiento de efluentes, que se encuentra al 71%.
El megacolector está integrado por más de 30 kilómetros de túneles, que recolectarán los desagües pluvio-cloacales de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y los transportará hasta la Planta de Pretratamiento de Dock Sud, cuya función es tratar los líquidos recibidos. Por su parte, el Emisario subfluvial, volcará los líquidos ya tratados al Río de la Plata, a 12 kilómetros de la costa, completando el proceso de depuración.
“El Sistema Riachuelo va a ser un antes y un después para abordar la principal causa de contaminación del río Matanza Riachuelo, que son los desechos orgánicos. Esta megaobra fue iniciada en el gobierno de Cristina, y para sorpresa de nadie fue demorada durante el macrismo, por lo que fue necesario trabajar fuertemente de la mano de AySA para lograr estos avances”, aseguró Sabbatella.
Esta obra, que beneficiará a más de 4.3 millones de habitantes de la región y, en un futuro, permitirá incorporar a 1.5 millones de personas a la red de cloacas, cuenta con una inversión proveniente del Banco Mundial, a través del préstamo BIRF 7706-AR por un monto de USD 718.032.000 y 9008-AR de USD 245.000.000 y su ampliación BIRF 9252-AR de USD 265.000.000, y del Poder Ejecutivo Nacional. El proyecto se lleva adelante a través de una Unidad Ejecutora conformada en ACUMAR que coordina los créditos, mientras que AySA es la encargada de la obra.
La megaobra de infraestructura permitirá solucionar integralmente la capacidad de transporte de los desagües cloacales en el área metropolitana, mejorará la calidad del servicio y contribuirá a evitar la llegada de efluentes cloacales al Riachuelo, que representan alrededor del 70% de su contaminación, motivo por el cual se trata de una de las intervenciones más importantes comprendidas en el Plan Integral de Saneamiento Ambiental de ACUMAR.