Más de 300 familias de la Cuenca recibieron el título de propiedad
En un acto realizado hoy en Lomas de Zamora, entregamos escrituras de sus viviendas a más de 300 vecinos de los barrios 1ero de Octubre y Libertad, en el marco del programa de regularización dominial que lleva adelante la Agencia de Administración de Bienes del Estado (AABE) junto con ACUMAR.
Durante un acto realizado hoy martes 1° de octubre en el club de la Parroquia Santa Cruz, de Lomas de Zamora, se entregaron más de 300 títulos de propiedad a vecinos de los barrios 1° de Octubre y Libertad que desde hace años esperan tener escrituras de sus viviendas, ubicada sobre tierras del Estado.
La escrituración no solamente garantiza los derechos ciudadanos de la posesión de una vivienda digna sino que son un indicador del cumplimiento de las condiciones de habitabilidad de cada vivienda y de la redes de servicio publico disponibles (agua, cloacas, electricidad, accesibilidad, etcétera).
“Es un día de felicidad para los vecinos de la Cuenca y un hito en lo referido al derecho al hábitat porque el acto de regulación dominial forma parte del tramo final del proceso de garantizar el acceso al hábitat. Los felicito porque van a ser propietarios de sus casas después de tantos años”, aseguró Dorina Bonetti, directora ejecutiva de ACUMAR, presente durante el acto de entrega de escrituras.
Los reclamos de los vecinos de tener sus escrituras surgieron en las Mesas de Trabajo de Campo Unamuno. Desde ACUMAR, articulamos con la Administración de Bienes del Estado (AABE) para facilitar el proceso y realizamos el censo a los habitantes de las viviendas.
+ de 300 familias de la cuenca ya tienen el título de propiedad de sus hogares ?
Nota completa: https://t.co/BXRwUtvhJY pic.twitter.com/tFBzMPnmoM— ACUMAR (@acumarriachuelo) 2 de octubre de 2019
Un equipo de trabajadores territoriales de ACUMAR estuvo a cargo del abordaje en el barrio, que implicó: brindar la información necesaria a todas las familias; realizar relevamientos de verificación de ocupación de los lotes; recolectar la documentación de cada familia; gestionar las firmas para la escrituración.
Hoy los vecinos del barrio tienen sus escrituras: “Aprendimos a organizarnos para tener agua, luz, apertura de calles y ahora los títulos de propiedad después de reclamar durante 30 años. Estamos muy felices”, afirmó Juana, una de las beneficiarias.