ACUMAR controló más de 400 establecimientos durante agosto
La Autoridad de Cuenca fiscalizó más de 400 establecimientos en toda la Cuenca. El objetivo de las inspecciones, realizadas durante el mes pasado, es identificar a los agentes contaminantes que deben adecuar sus procesos productivos para trabajar de manera armónica con el ambiente.
Durante el último mes, la Dirección de Fiscalización y Adecuación Ambiental realizó 485 inspecciones en el territorio de la Cuenca Matanza Riachuelo, sumando más de 2800 operativos en lo que va del año. El objetivo de los controles es detectar desvíos e infracciones a la normativa ambiental. Además, el cuerpo de inspectores del organismo constató durante 2017 el cumplimiento de más de 200 clausuras vigentes, trasladando a la justicia 36 violaciones a la medida.
ACUMAR cuenta con facultades de regulación y control respecto de las actividades industriales y de prestación de servicios, o cualquier otra tarea con incidencia ambiental en la Cuenca. El trabajo de los inspectores se intensificó a partir de marzo de este año cuando entró en vigencia una nueva normativa que restringe aún más los límites de descargas en los cursos de agua que conforman la Cuenca Matanza Riachuelo.
Por esta razón y para reforzar el accionar de las áreas de Fiscalización y Adecuación Ambiental, el organismo presentó, el pasado 8 de septiembre, la Patrulla Ambiental, una cuadrilla especial conformada por una flota de 19 vehículos y 37 inspectores.
El objetivo de este equipo es realizar inspecciones y constatar el cumplimiento de los planes de adecuación implementados, además de recorrer toda la Cuenca en busca de infracciones tales como vuelcos clandestinos de efluentes industriales, deficiente gestión de residuos, emisiones gaseosas presumiblemente fuera de estándar o potenciales pasivos ambientales, entre otros.
Esta cuadrilla también montará una guardia permanente para atender denuncias y efectuar controles de manera aleatoria a establecimientos de seguimiento particular, lo que cubrirá un aspecto poco relevado en las industrias de la zona que es la operación que realizan en horas de la noche y la madrugada.
Para realizar un abordaje integral de la problemática, la nueva Patrulla Ambiental trabajará en coordinación con otros organismos de control ambiental como la Agencia de Protección Ambiental porteña (APRA), el Organismo Provincial para el Desarrollo Sostenible (OPDS), la Autoridad del Agua de la provincia de Buenos Aires (ADA) y Aguas y Saneamientos Argentinos (AySA).